Monasterio de San Antolín de Bedón, Llanes
San Antolín de Bedón es el nombre que recibe esta edificación, situada cerca de la desembocadura del Río Bedón, en la Playa de San Antolín, en Llanes. Ha sufrido diversas modificaciones a lo largo de su historia, y se mantiene en pie de milagro. Esto es algo que el viernes pasado, nos contó Mónica Balmori, durante nuestra visita guiada.
El pasado verano, después de dos años de cierre, el monasterio recuperó las visitas guiadas, una vez suscrito un acuerdo entre la propiedad y la propia Consejería de Cultura.
La visita guiada dura unos 45 minutos y abarca la historia y arquitectura de un templo único en Asturias, posiblemente la joya del románico de Llanes. Esta es la única manera de poder visitar el enclave.
Declarado Bien de Interés Cultural, en categoría de Monumento, según se publicó en el BOE 4/6/1931. El templo benedictino es lo único que queda de un antiguo monasterio del siglo XII seguramente construido sobre otro anterior del X o del XI.
Al ser BIC, las visitas guiadas son obligación legal en verano y de, al menos, un día por semana. Este año las visitas se ampliaron hasta diciembre y, mi hermana y yo, quisimos disfrutar de la última visita guiada del 2019.
Cuenta la leyenda…
Al no existir una fecha concreta sobre su fundación, existen varias leyendas:
- La primera versa sobre una cacería, con el Conde Muñazán (Tío del Cid) como protagonista. Éste perseguía a un jabalí, que llegó a esconderse en una cueva, a donde el conde le siguió. Allí vio una imagen de San Antolín iluminada. Atribuyó este hallazgo a un aviso del cielo y mandó construir en aquel paraje un monasterio en honor al santo.
- La segunda versa sobre un tema «amoroso«. En este caso el protagonista es el Conde Don Munio, hijo de Don Rodrigo Álvarez de las Asturias. Paseando por el bosque dio con la luz de una cabaña, en la que se encontraba una hermosa joven de la que se queda prendado. Ella esperaba a su prometido, que se había ido a la guerra. Al cabo de unos días el conde vuelve al bosque, y los encuentra juntos. Preso de los celos, decide disparar su ballesta y matarlos a los dos. Arrepentido, dedica su patrimonio a la construcción del cenobio, en el mismo lugar en el que se encontraba la cabaña y, finalmente, se pone el hábito para tratar de curar su alma de tanto dolor provocado.
Un poco de historia sobre San Antolín de Bedón
El territorio en el que se encuentra administrativamente pertenece a Bricia, pero parroquialmente pertenece a Naves, por toda la historia que a continuación te voy a contar.
Los primeros textos que aparecen del Monasterio de San Antolín son de 1185, aunque la inscripción que encontramos dentro de la iglesia es de 1205.
En un primer momento todos los monasterios dependen de las familias nobiliarias de la zona, en este caso, la familia de los Aguilar y los Posada. Posteriormente pasaron a ser de la orden de los benedictinos: San Antolín de Bedón, San Salvador (Celorio), San Pedro de Villanueva (Cangas de Onís), San Bartolomé (Nava) y Santa María de Villamayor (Piloña).
Todos ellos estaban situados en zonas muy fértiles, próximos a los ríos, aunque con la contrapartida de que, en invierno y primavera, sufren grandes inundaciones.
En el siglo XVI, el abad de Posada lleva a la ruina el monasterio. Los benitos de Valladolid deciden hacerse cargo, pero los nobles llaniscos piden que forme parte de algún monasterio más cercano, y se une al de Celorio.
Posteriormente, se nombra iglesia parroquial de Naves, Celorio y Rales, hasta que en el siglo XIX cae de nuevo en desuso, es entonces cuando se llevan el retablo y la pila bautismal del monasterio a la capilla de Naves. En 1822, con la desamortización, se pone a la venta el terreno, sin incluir la edificación. El Estado, no inscribe como suyo el monasterio y de ahí la situación de incertidumbre, queda en tierra de nadie.
En 1923, tras estallar la guerra civil, el edificio acoge numerosas colonias infantiles. En una de las edificaciones adyacentes vivieron los guardeses, hasta los años 90, una época muy reciente para el estado de abandono en el que se encuentra actualmente.
Los vecinos de Naves llegaron a temer que el monasterio sirviera como piedras de cantera para levantar un puente, así que solicitaron que sirviera para la creación de una nueva iglesia en el pueblo. La Comisión de monumentos de la Provincia de Oviedo elaboró un informe, en el que explicaban que el estado del edificio no era tan lamentable como para que fuese derruido, lo que permitió que se siga conservando en pie.
Más información: «San Antolín de Bedón no tiene quien le inscriba»
Iglesia de San Antolín de Bedón
La construcción que se conserva es una iglesia de estilo arquitectónico románico, de tres naves, con tres portadas: al norte, al sur y al oeste (la principal) y cabecera, con tres ábsides semicirculares.
Este templo cuenta con dos entradas: una principal que cuenta con arquivoltas ojivales sobre columnas y otra meridional similar a la principal, pero sin columnas.
No se pueden realizar fotos en el interior, aunque te adelanto que la decoración interior es escasa. Podemos ver la línea de imposta, que recorre el interior y el exterior. Los capiteles más cercanos al altar, terminan en el collarín sogueado, con diferentes decoraciones: en uno, aparecen unas palmas mirando hacia arriba (miran hacia el cielo, simbolizan el bien), en otro, aparecen mirando hacia abajo (miran hacia el infierno, simbolizan el mal).
Destacaría la esbeltez de su altura y la techumbre de madera, restaurada manteniendo el estilo original en el que fue edificada.
Predominan los arcos de medio punto, sin embargo la nave central se abre a las laterales mediante arcos apuntados (típicos del estilo gótico), lo que lleva a pensar que se trata de una iglesia de transición y pionera entre los dos estilos, Románico y Gótico. Tiene similitud con la iglesia de Santa María de Valdediós, ya que, según nos contó Mónica, se cree que el maestro de obras hizo primero ésta y luego la iglesia de Villaviciosa. Mientras que los maestros se iban moviendo, los canteros eran contratados en la zona de la obra.
Después de las intervenciones de Menéndez Pidal en 1955, se encuentran unas laudas de un abad, que podemos ver a la puerta de la iglesia. También se conservan unas tumbas, cargadas de decoración, encontradas en el exterior de la iglesia. Éstas pertenecen a las familias Aguilar y Posada.
Portadas de la Iglesia de San Antolín de Bedón
Esta es la portada Oeste, que según Mónica es una copia de la original, de creación más reciente que la portada Sur.
En el año 99, remozaron las paredes, dejando sólo a la vista la línea de imposta, los vanos, la portada y los contrafuertes.
En la Portada Sur, que se mantiene original, podemos observar que en los canecillos hay varias representaciones. Como no se aprecian muy bien en la foto, te las describo a continuación.
Están divididas en tres escenas: la primera la juglaresca, la segunda de caza y, la tercera, de animales fantásticos.
- Representa un ave hacia el suelo.
- Hay dos figuras, una tocando la flauta y otra doblada.
- Es un joglar tocando un laud.
- Una juglaresa tocando un pandero y un perro a sus pies.
- Es la separación entre las escenas.
- Escena de caza con un jabalí y un cazador asestándole una lanza.
- Representa la llamada a la caza, con un cazador que porta una lanza y lleva perros a su lado.
- Moldura de Separación de las escenas de caza.
- Aparecen dos animales monstruosos.
- Monstruo girado hacia quien le mira.
La portada es abocinada, con varias arquivoltas moduladas. La segunda de media caña y con capiteles sencillos, sin apenas decoración.
Necesidad de cuidados urgentes
Si seguimos el recorrido hacia la parte Este de la iglesia, podemos comprobar el mal estado en el que se encuentran los tejados de la iglesia, entre otras cosas.
En realidad todo el conjunto de edificaciones está sumido en el abandono y le urge una actuación urgente, no podemos olvidar que se trata de un Bien de Interés Cultural, con todo lo que ello implica.
Las visitas guiadas, además de poner en valor un bien tan interesante, tratan también de ser una reivindicación en ese sentido, para que se tomen medidas de manera urgente, antes de que sea demasiado tarde.
El entorno en el que se encuentra situado el Monasterio, bien merece que sea cuidado para que no caiga en el olvido.
San Antolín de Bedón en el Museo Bellas Artes de Asturias
En el Museo de Bellas Artes de Asturias podemos ver una representación de San Antolín de Bedón, pintado en óleo sobre lienzo (1910), por el pintor asturiano Darío de Regoyos, titulado: «San Antolín de Bedón. Siglo X»
Darío de Regoyos (Ribadesella, Asturias, 1857-Barcelona, 1913), Tuvo una evolución pictórica que va desde una etapa pre-impresionista, pasando por el expresionismo, el puntillismo y el impresionismo. Uno de los motivos por el que más es conocido son los paisajes.
Este lienzo fue adquirido por el Estado, en nombre del Museo de Bellas Artes en Subastas Segre en abril de 2009, por 48.000€. En él, Regoyos centra la atención en el edificio principal, concretamente la Portada Sur de la iglesia.
Enlace a la documentación de Regoyos en el Museo de Bellas Artes de Asturias.
Acceso y visita siempre con guía oficial
Como ya te comenté, esta visita sólo es posible realizarla con Mónica Balmori (guía oficial del Principado de Asturias), en temporada de visitas.
Si quieres realizar visitas a otros lugares de Llanes, te recomiendo que contactes con ella. También realiza talleres infantiles.
¡Espero que te haya gustado y que te animes a visitar San Antolín de Bedón el próximo año! Mis recomendaciones para comer, son desplazarse a Llanes o Ribadesella.
